Dudas en la narrativa sobre "exceso de capacidad”

Estados Unidos podría imponer aranceles a las importaciones de sectores emergentes chinos, incluido un posible arancel del 100 % a sus vehículos eléctricos (VE). La medida, en medio del revuelo sobre "exceso de capacidad" china en productos ecológicos, enfrenta más retos y preguntas.

Los expertos sostienen que las políticas proteccionistas de Washington revelan una mentalidad defensiva y dificultades para competir con las nuevas industrias energéticas chinas. Según ellos, el proteccionismo comercial será contraproducente.

El gobierno de Biden planea imponer nuevos y serios impuestos a los VE, los semiconductores, los equipos solares y los suministros médicos chinos. Los aranceles sobre los primeros, en particular, podrían cuadruplicarse desde el 25 % actual al 100 %, informó Associated Press.

La medida, cuyo anuncio está previsto para el martes, llega en medio de la propaganda estadounidense sobre el "exceso de capacidad" de China en los ramos emergentes para proteger su propia industria, al tiempo que incrementa las subvenciones.

El proteccionismo comercial tendrá efectos no deseados

Los expertos chinos sostienen que los aranceles a los VE chinos y la exageración de "sobrecapacidad” china muestran un avance en el proteccionismo comercial de Estados Unidos y su temor ante la creciente ventaja de China en el mercado mundial de unidades eléctricas.

No obstante, los impuestos adicionales tendrán un impacto limitado, ya que se trata más bien de un movimiento político con fines electorales.

Tian Yun, economista con experiencia en Beijing, declaró el domingo que la iniciativa revela que, incluso con un arancel del 25 %, los VE de fabricación estadounidense no superan en términos de rentabilidad a sus pares chinos.

"Demuestra que el sector manufacturero estadounidense yace en una posición defensiva y solo puede mantener el desarrollo de la industria nacional mediante aranceles elevados, ya que la competitividad china en el campo sobrepasa con creces a la de ella”, apuntó Tian.

Pese a ello, los especialistas consideran que el efecto global sobre los VE chinos sería mínimo debido al bajo volumen de exportación [a Estados Unidos]".

Zhang Xiang, director del Centro de Investigación sobre Cooperación Internacional en Automoción Digital del Foro Mundial de Economía Digital, anotó el domingo que las ventas chinas de autos de turismo al país norteamericano son principalmente de marcas estadounidenses fabricadas en China. Hay pocas marcas locales que exporten VE a dicho mercado.

"El aumento impositivo hará que las empresas y los consumidores estadounidenses sufran más pérdidas", constató Zhang.

La idea de imponer aranceles altos a los productos chinos tiene una motivación política, para ganar votos de cara a las elecciones, argumentó Gao Lingyun, experto de la Academia China de Ciencias Sociales.

Las acciones de Washington violan a todas luces las normas de la OMC y existe el riesgo de que los aranceles resulten en mayores disputas comerciales entre ambos países, advirtió.

En respuesta a los informes sobre el tema, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Lin Jian, manifestó en una rueda de prensa celebrada el viernes que las acciones "duplican la culpa de Estados Unidos", acotando que los impuestos de la Sección 301 establecidos por la anterior administración a China han perjudicado de manera grave el comercio normal y los intercambios económicos bilaterales.

Lin instó a la parte norteamericana a seguir las normas de la OMC, dejar de lado los aranceles adicionales y no imponer otros nuevos. China tomará todas las medidas necesarias para defender sus derechos e intereses.

Dudas sobre el "exceso de capacidad”

Al mismo tiempo, el revuelo sobre el exceso de capacidad de China en determinados rubros encara muchos desafíos.

Kai Ryssdal, presentador de un programa de la radio pública Marketplace, entrevistó hace poco a la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, y sugirió que el país podría haber estado exagerando en este aspecto porque los chinos están ganándole la carrera a Estados Unidos en estos sectores, según la transcripción publicada por Marketplace en su sitio web el jueves.

Ryssdal agregó que mientras Estados Unidos afirma que China subvenciona a sus sectores emergentes, este también lo hace y en mayor medida con "miles de millones" de dólares.

En agosto de 2022, Biden promulgó la Ley de Reducción de la Inflación, que incluye incentivos por unos 369 000 millones de dólares a la producción y uso de vehículos eléctricos.

El Departamento del Tesoro emitió a principios de este mes la normativa definitiva para los créditos de la mencionada regulación. Los estadounidenses que compren unidades eléctricas ya no podrán solicitar créditos fiscales federales de hasta 7500 dólares si sus coches poseen componentes chinos, reportó The Washington Post.

El Ministerio de Comercio de China dijo en diciembre que los VE y las piezas de auto chinas son bienvenidos en el mercado mundial, y excluir a las firmas chinas de estas ayudas es una política típica no orientada al mercado.

La opción discriminatoria de subvenciones va en contra de los principios básicos de la OMC, perturba el comercio y la inversión internacionales y socava la estabilidad de la industria mundial y las cadenas de suministro, aseveró la cartera.

Los expertos sostuvieron que es crucial que Washington rectifique sus políticas industriales discriminatorias en salvaguarda de una cadena industrial mundial de VE estable.

"La decisión de aumentar los aranceles y negarse a trabajar con China en el sector de las nuevas energías no solo es antieconómica, sino también insostenible, en última instancia perjudica la competitividad de su propia industria", destacó Gao.