Foto: CCTV

Las investigaciones sobre el único panda blanco del mundo avistado en la provincia de Sichuan, en el suroeste de China, lo identifican como macho y demuestran que crece sano e interactúa con normalidad con sus pares salvajes de la Reserva Natural Nacional de Wolong.

En un principio, las cámaras de infrarrojos solo captaron en 2019 una imagen de perfil del cachorro sin manchas en el cuerpo y con unos ojos rojos particulares. Personal del lugar continuó con las grabaciones durante 4 a?os con vistas frontales más claras que develaron trayectorias superpuestas con otros pandas salvajes y sus actividades, tales como comer bambú, frotarse contra los troncos, además de aparearse o pelearse, informó la Televisión Central de China.

A fin de confirmar su sexo, los empleados lo siguieron vigilando con transmisiones en tiempo real y lograron llegar a su hábitat a más de 2500 metros sobre el nivel del mar donde recogieron muestras de sus heces.

He Tingmei, subdirector de la autoridad de gestión de la reserva, dijo que se confirmó que este era macho con tecnología de secuenciación genética y análisis e interpretación precisos. Tras nuevas pruebas, se podrá conocer más acerca de su biología.

Los estudios sobre su hábitat muestran que su área de actividad es de unos 4,4 kilómetros cuadrados y su dependencia del bambú no difiere de la de otros de su especie.

Asimismo, se encontró que vivía cerca de su madre y hermanos peque?os de acuerdo con las imágenes de interacción y trayectoria con otros dos pandas de pelaje blanco y negro.

En los vídeos de entre 2021 y 2023, el panda albino aparece con otros dos en el hueco de un árbol en múltiples ocasiones.

En uno, camina hacia la madre panda y su cría que descansan en el lugar y comienza a interactuar. Sin embargo, la hembra incita al cachorro a ahuyentarlo por lo que se especula que sea la madre de ambos.

Las cámaras grabaron a otros animales como pandas rojos, osos negros asiáticos, leopardos de las nieves y chacales, que comparten hábitat con los pandas gigantes.

Según Li Sheng, investigador de la Facultad de Ciencias de la Vida de la Universidad de Beijing, salvo los chacales que cazan en grupo y a veces amenazan a los pandas, otros carnívoros apenas le suponen riesgo.