Prensar, filtrar y escaldar el arroz... Los productores de vino de Shaoxing han hecho sus vinos del mismo modo desde hace a?os.
El mes de abril es la temporada de mayor actividad para Tian Jiaben, un anciano aldeano que vive cerca de la fuente del Lago Jianhu, en Shaoxing, al este de la provincia de Zhejiang.
Treinta y seis arroyos de agua cristalina formados por los manantiales de las monta?as nutren el lago, que se ha convertido en el corazón de la producción del mundialmente famoso vino de arroz amarillo.
Estos días, el maestro productor de vino Tian está trabajando en su patio trasero, que está lleno de hileras con botes de vino.
Después de prensar el arroz glutinoso fermentado en un gran tanque de madera, el vino fluye lentamente a través de los tubos de bambú dentro de los recipientes de vino. De repente, un olor dulce impregna el aire.
Tian se agacha y con un peque?o cuenco coge un poco de vino y lo sorbe.
“La calidad del vino dictamina cuanto tiempo puede permanecer el vino en la bodega”, dice Tian. “Si su calidad no es suficientemente buena, contra más tiempo esté en la bodega, más ácido será su sabor.”
Una vez que haya puesto el vino en los recipientes, primero cubrirá la obertura con ojas de flor de loto, y las sellará con barro, y entonces rociará agua de cal por la superficie.
Los productores de vino veteranos saben que la calidad del agua y del arroz glutinoso no son suficientes para garantizar un buen resultado. El proceso ha sido declarado patrimonio cultural inmaterial del estado.
A continuación, los botes se entierran en paja de arroz seca.
“El clima, el agua, el arroz glutinoso, y las habilidades de los productores hacen del proceso una fórmula compleja”, insiste. El éxito requiere “rica experiencia y alta calidad de las materias primas.”
El hombre de 65 a?os se ha dedicado a la producción del vino desde hace cinco décadas. Como Tian, cientos de productores locales están trabajando a doble jornada para producir vino de arroz amarillo.
Los vinicultores utilizan métodos que han cambiado muy poco de la forma en que sus ancestros trabajaban hace miles de a?os. En 2006, el proceso de producción del vino de arroz amarillo de Shaoxing fue catalogado como patrimonio cultural inmaterial bajo la protección del estado.
Para la población local, la aromática especialidad local es más que una bebida. También se usa como medicina, para cocinar y como regalo.
Cada a?o, cuando las flores se abren y los árboles se vuelven verdes, es el momento de sacar los recipientes de arroz glutinoso que se ha estado fermentando durante el invierno y el principio de la primavera. Después de 90 días de prensar, filtrar y escaldar el arroz, los trabajadores reciben un premio con aroma dulce que una vez empaquetado viaja por todo el mundo.